Aarón Rosette
2 de sep de 20203 min.
Actualizado: 16 de jul de 2023
La elección de un responsable de marketing educativo es un factor decisivo que puede ayudar a los colegios a impulsar sus números positivos e incrementar la visibilidad de sus beneficios.
Por el contrario, si la persona responsable del marketing de un colegio no está lo suficientemente preparada afectará a la marca educativa y generará números negativos como reducción de alumnado y bajas en los ingresos totales.
Presenta ideas ambiciosas, pero sin explicar cómo las llevará a cabo.
No cuenta con un plan de marketing debidamente elaborado, pues suele actuar a partir de chispazos creativos y no siguiendo una estrategia.
No utiliza datos históricos ni establece objetivos numéricos en las metas que plantea al colegio.
Nunca comprueba el ROI (Retorno de Inversión) de los gastos realizados.
Desconoce métricas como costo por lead, tasa de conversión y ticket promedio del colegio.
Al carecer de métricas, invierte en acciones de marketing y promoción que no brindan beneficios.
Construye campañas publicitarias sin tomar en cuenta la opinión de maestros y alumnos.
Nunca presenta informes de resultados.
Ahora que ya sabemos cómo detectar a una persona poco preparada en el marketing educativo, es momento de preguntarnos qué cualidades debe poseer una persona apta para esta labor.
Además de la experiencia en el sector, la correcta administración de recursos y las habilidades de gestión, se recomiendan estas cualidades.
Necesita conocer a la perfección la marca educativa con la cual trabaja. Comenzando por su misión, visión, valores, mercado meta y sus diferentes tipos de identidades: conceptual, visual, lingüística, espacial y multimediática.
De igual manera, debe conocer sus carencias, necesidades, metas y objetivos a corto, mediano y largo plazo.
No basta con conocer la marca, también debe conocer las características del servicio educativo que se oferta: sus particularidades, su propuesta de valor, sus ventajas e incluso sus deficiencias.
El trabajo cercano entre maestros, alumnos y coordinadores garantizará una sinergia benéfica para el colegio.
El marketing educativo requiere de un marco ético que guíe la toma de decisiones en función del bienestar de los alumnos, los profesores y sus familias.
Sin un perfil de ética, honestidad y responsabilidad, la marca terminará afectada por decisiones 100% comerciales que deshumanizarán al colegio.
Estamos vendiendo servicios educativos, así que lo menos que se espera de nosotros es que sepamos escribir y hablar correctamente.
Las faltas de ortografía, errores de sintaxis y las muletillas dañarán la credibilidad de aquel que intente vendernos formación académica.
Además de ser una persona experta en Mercadotecnia Educativa, debe conocer aspectos referentes a la Educación y sus modelos pedagógicos.
Una persona desinteresada por conocer más de las vanguardias educativas y las nuevas tendencias de enseñanza se verá rebasada por el sector.
Se requiere trabajar de forma cercana, honesta y cordial con la persona que dirige el colegio, así que se espera una relación de confianza, empatía y amabilidad donde se compartan intereses y objetivos.
El trabajo entre personas profesionales conlleva tener diferencias, sin embargo, ese mismo profesionalismo es también el que permite llegar a acuerdos donde se antepongan los intereses institucionales.
Deberá tomar decisiones sobre los mensajes que la institución emitirá, así que se espera que tenga la sensibilidad de elegir aquellos que mejor expresan el contenido.
Un experto en Marketing Educativo debe ser una persona interesada en el arte, la pintura, la fotografía, el cine y el diseño en general.
Es normal que el responsable de Marketing atienda a interesados y a padres de familia, así que deberá tener habilidades para la correcta atención personal.
Deberá crear procesos de atención al cliente que comuniquen correctamente los valores del colegio.
Deberá rendir cuentas de inversiones y gastos, así que se espera que sepa llevar controles administrativos precisos.
No hay Marketing sin métricas ni números.
Un buen responsable de Marketing es una persona organizada que planifica las acciones y lleva calendarios y controles exhaustivos de las tareas.
Dar seguimiento constante a los indicadores y realizar informes que comprueben los resultados numéricos del plan de marketing.